Hazme compañía
No me dejes con la intriga,
De pensar que mi soledad es fatiga;
Que mi suerte cayó de prisa.
Abárcame con un abrazo
Y no dejes caer mis brazos;
Llévame a una suerte de cueva
Donde pueda esconder esta pena.
Hazme caricias serias
De esas de madre naturaleza,
Confía en mi progreso
Que de eso están hechos mis rezos.
Hazme el favor de acompañarme
En estas horas vacías;
No tengo en mi alma comida
Para saciar mis ansias de vida.
Cuando llegue la noche
Acércate a mi casa;
Toca el timbre despacio
Que adentro se anunciara el alba.
Comparte música bonita,
Una charla, y si eres mujer, la cama;
Despiértame al amanecer
Y no renuncies a mi alma.
Quédate un ratito
Que pronto llegará la madrugada…