Demoró un poco más de la cuenta…

A ojos cerrados.

Como no tiene novia ni queja;

Se entretiene suelto, tras las rejas!

Le encanta la parodia

De su vida dolorida y calavera.

Gustaba del sol en la mañana

Cuando la persiana, ya no engaña.

No titubeó que la quería,

Ni le asustó el remordimiento;

Intentó solamente;

Vaciarle un cargador entero!

El tiempo se acerca...

llevo algún cargamento.

La lomera me pesa,

pero me sobra el aliento!

Sigo este camino

por dónde me cuadra;

a veces le erro

...otras no entiendo.

Pero al final del recorrido,

habré seguido mi destino.

Silenciosa en la luz,

la vela llamea, al reflejo de su cruz...

Vientos cardinales atienden,

 pasiones celestiales...

Brillo de hombre;

encumbrando tempestades!

Aquí estoy... Abajo!

En la alto del infierno...

defendiendo al cielo

...de todos sus sosiegos.

Música impartida

con la savia de la ira.

Casi nada es fantasía!

Sabbath bloody Sabbath!!!

Vengo de abajo del agua...
De la lluvia que no cesa
...ni me deja.
Tres veces salí bajo ella
y pensé que era bendita;
me reflejaría en mi propia vida
charco a charco cada día.
También bajo el dintel,
descansé un rato.
Cobijé un poquito
...el pucho y el mambo.

Durando no más...

estirando la pata pa' llegar.

No hay magia que levante;

ni cosa del azar...

duerme solitario el camino

sin lugar donde acampar.

En la mañana de ayer, advertí mi desvelo.

Quizá 10; tal vez catorce,

son los calendarios

que sumé esta noche.

De deseos esta hecha la corte;

el reinado de los sueños

...manifestados con silencio.

Esta noche será como pocas...

Al corazón, el horizonte lo convoca.

Respirando un aire de antes…

Se asoma el recuerdo milenario

...del ritual ...y los mates.

Cuanta brisa nueva …y quieta.

Cuanta humedad, ya seca,

cuanta melancolía y gozo

acompañaron mis noches eternas…

Su andar y sus metas,

me acercan donde nadie va…

Montado sobre sus ruedas

piso asfalto y tierra negra.

Es oscura como su leyenda,

aguarda lo mismo que yo

cuando viajo de sorpresa…

Tristeza sobre ruedas

tristeza en bicicleta;

alegría indomable,

también atraviesa…

Me lleva por cada rincón

y entre dos autos,

es un callejón…

A veces me alcanza pronto la fatiga,

otras, vuelo mil horizontes en su silla.

Arriba de ella, estoy en comunión…

con lo desagradable y tristón;

o cada victoria de la ambición;

sudo y respiro aire puro

me llevo la brisa por canción!

Cuanta gente perdí en cada rincón…

sin embargo, en bicicleta

los puedo mirar de refilón.

Lindos paisajes

y mejores “linajes”

Todo lo cruzo

o me detengo a su visión!

Todo lo puedo;

soy bicicleta, mate y tabaco negro…

soy esos que para muchos, “es cosa de negros”.

Acontecí un día…

Volví de algún lado,

Y me encontré con nada…

Lleve un poquito de risa a mi estómago

Y deglutí como pude.

Se me escapó un animal de dentro…

Se escapó lo que soy;

Y ya no había fundamento!

Sigo corriendo;

Sigo andando descontento;

Sin risas ni fragmentos,

Olvidado de algunos momentos

En que fui anfitrión y silencio.

Dios me trajo a esta vereda,

Trato de no renegar ni desobedecerla…

Pero es cierto que en mi lomera

Ya cabió mucho de espera!

Si tuviera otra oportunidad…

Digo; de cruzar la acera;

Trataría de estar virgen…

Y aguantarme la que venga.

A metros un amigo descansa;

tal vez duerme con Dios; 

en el destierro de su casa

su hogar y su perdón.

Pasa que en la vida

nada duele por eterno…

Duele la mirada,

ya vapuleada!

Si la calma de una noche

adquiriera la paz necesaria,

no veríamos al sol

tapado por la nostalgia.

Ambiciono saber que todo pasa,

que no dura 100 años;

pero el dolor

no se disipa con el alba.

Dedico esto a la persona

que cerca mío “descansa”

Está dormido desde un sueño

que ser mañana no aplaca.